15 de mayo de 2015

LA CONTINUIDAD DE LA CONSCIENCIA. LOS SUEÑOS LÚCIDOS.

“Me habéis oído decir que somos tan responsables de lo que hacemos en sueños como de lo que hacemos en vigilia, aunque ambos mundos son ilusorios frente al estado de Pura Conciencia. 
La pregunta es ¿existe una continuidad de la conciencia que pueda manifestarse de manera entendible? 
¿Es posible no desconectar la Conciencia a lo largo de las 24h del día? 
Este es un tema esencial de los textos y enseñanzas tradicionales y voy a filtrarlo para que seas consciente del objetivo que tienes que alcanzar en el camino espiritual.
Aunque ya comprenderás que los que no son capaces de detener temporalmente sus procesos mentales ni de atreverse con las emociones fuertes, no tienen cabida en esta aventura… ¡Vamos allá!

La primera comprensión importante es que, tanto en vigilia como en sueños, has de alcanzar un estado de conciencia acrecentada. 
Un despertar lúcido del instante, estés en el escenario que estés y viviendo la experiencia que te toque vivir en ese momento. Es lo que llamamos Sueño Lúcido o estar despierto en medio de un sueño. Así podemos comenzar a describir una línea de continuidad entre:
1- La Conciencia de vigilia donde se manifiesta el sentido del yo, que llega hasta ser Testigo de los procesos mentales en meditación.


2-La lucidez del Sueño consciente con ensueños . Se trata del despertar en medio de un sueño, mientras el argumento inconsciente continúa, pero tu eres consciente de que estás despierto, y puedes comenzar con el trabajo propio de la ensoñación… 

3- De este estado pasarás súbitamente a convertirte en Testigo no implicado de los procesos del sueño, ajeno a sus contenidos y en un estado de paz interna. 
Vivirás un proceso de total no identificación con los contenidos del sueño, y progresivamente dejarás de vivir los sueños, desaparecerán los pensamientos, para entrar en el Vacío consciente.

4- Y el último estado es ser Testigo de un sueño sin sueños. En la filosofía hindú, es la experiencia de la conciencia pura. Es el fondo que subyace y trasciende los tres estados comunes de la conciencia de vigilia, sueño y sueño sin sueños. El Yo se vuelve universal, se expande sin límite y alcanza el tiempo de la simultaneidad de todo lo creado Ahora. Te disuelves en el universo entero. Es la plenitud total y no controlas nada.

Así pues, si que podemos trazar una línea evolutiva en la transformación de la conciencia ordinaria hasta convertirse en Conciencia Cósmica. Se trata de algo que hemos de tener siempre claro. 
El humilde camino que comienza por deshacer ladrillo a ladrillo las emociones negativas y los pensamientos limitantes que llevamos en la mochila, disolver las rutinas y desconectar las creencias sobre el bien y el mal, tiene un sendero bien marcado hacia la libertad del Ser.  
Un camino que da sus primeros y torpes pasos en los sueños lúcidos, que avanza con el estado de Observador de los propios sueños y de Conciencia testigo del Sueño sin sueños, para perfeccionarse en el estado de la Pura Conciencia divina, que otorga la capacidad para mantenerse en todo momento, de día y de noche, enchufado a la red universal del espíritu.”
Emilio Fiel


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